RELACIONES COMERCIALES

 

Intercambio comercial
El comercio bilateral guarda básicamente una relación de complementariedad. Japón importa desde Argentina cereales, pescado y mariscos, aluminio en lingotes y en productos aleados, mineral de cobre y otros productos primarios y sus manufacturas, y exporta fundamentalmente automóviles, máquinas y aparatos eléctricos.

 

Sin embargo, junto al deterioro de la situación económica argentina, el intercambio bilateral experimentó una sensible disminución. La importación desde Argentina, que ascendió a 691 millones de dólares en 1998, cayó a 400 millones de dólares en 2001, y registró 443 millones en 2002 y 435 millones de dólares en 2003. La exportación hacia Argentina ascendió a 982 millones de dólares en 1998, cayó a 503 millones en 2001 y a 188 millones en 2002 para remontar a 266 millones de dólares en 2003.

 

Con respecto a la exportación de los productos agropecuarios de la Argentina, no se observa incrementos en la exportación de productos como carne y trigo, debido al problema de la aftosa y a la discrepancia en la calidad y el gusto del mercado japonés.

 

En abril de 2003 se autorizó la exportación de los productos cítricos argentinos como limón al mercado japonés, tras aprobar un estudio realizado para el tratamiento de la plaga de la mosca del Mediterráneo.

Inversión directa
La inversión directa japonesa estaba limitada hasta mediados de la década del 80, a rubros de pesca y electrodomésticos aprovechando el régimen promocional de Tierra del Fuego. Ya durante la década del 90, Japón estaba rezagado en materia de inversión en sectores privatizados de alta rentabilidad. A partir de la inversión de la firma Toyota en el establecimiento de una planta automotriz en 1994, el interés de las firmas japonesas fueron creciendo, y entre 2000 y 2001 hubo inversiones en los rubros automotriz y software. No obstante, la inversión directa de empresas japonesas se mantiene en menos de 0,5% del total de la inversión directa extranjera.